MIRADOR LA PICA TEN CON NIÑOS

Una magnífica atalaya en el Valle de Sajambre

El Valle de Sajambre esconde numerosos rincones naturales sorprendentes, uno de ellos es el mirador de La Pica Ten. Desde la cumbre las vistas del valle, salpicado de pequeños pueblos de montaña y de cumbres montañosas pobladas de espesos bosques de robles y hayas es una auténtica maravilla.

La Peña de Ten es una de las atalayas más sorprendentes y desconocidas del Valle de Sajambre. Desde la cumbre se vislumbran los frondosos bosques de hayas y robles que pueblan las laderas del Puerto del Pontón, las cumbres montañosas que delimitan el Valle de Sajambre, el desfiladero del Sella e incluso se intuyen las cumbres del macizo occidental de los Picos de Europa.

¿Planificando una escapada?

En nuestra guía de senderismo “Excursiones con niños por Castilla y León”, encontrarás 40 rutas por enclaves sorprendentes.

Ver libro

Comprar libro

Dónde comenzar la ruta al Mirador de La Pica Ten

Vamos a iniciar la ruta en el paraje conocido como Los Trabanzos. Para llegar hasta este punto, hay que ascender por la carretera N-625 que une Oseja de Sajambre con el Puerto del Pontón. En el trayecto pasaremos por el Mirador de Oseja de Sajambre, en el que hay que hacer una parada sí o sí, bien a la subida o bien al volver. Continuamos hacia el Puerto del Pontón, y a la altura del km 116, en una curva hacia la izquierda, hay una señalización vertical correspondiente al Camino del Arcediano.

Hay que aparcar en este punto, junto a la carretera. No hay mucho espacio, pero suficiente para estacionar unos 3 coches.

Itinerario de la ruta al Mirador de La Pica Ten

Bosque de hayas y robles de Trabanzos (alt: 985 m)

Hemos dejado el coche en el punto en que la Senda del Arcediano cruza la carretera N-625 para ir descendiendo hacia Oseja de Sajambre. En este enclave, tenemos que coger el camino que se dirige precisamente hacia Oseja, para abandonarlo sólo unos metros más adelante a la altura de una edificación. Es necesario bordear una casa de piedra, girando a la izquierda, y dirigiéndonos de frente hacia el bosque. Si elevamos la vista, observaremos que, sobre un promontorio rocoso se ubica el mirador de La Pica Ten.

Para alcanzar nuestro objetivo, nos adentraremos en un frondoso bosque de hayas y robles. Aunque el sendero no está señalizado, es sencillo seguir el trazado hasta alcanzar unas escaleras. Estos peldaños excavados en la tierra y sustentados por travesaños de madera, nos van a ayudar a salvar el desnivel por la arboleda. Según vamos ganado altura las hayas se hacen más presentes, acompañadas ahora por el perenne acebo.

Un área recreativa accesible para todos (alt: 1.100 m)

Cuando llevamos recorrido 1 km, observaremos que el bosque clarea y nos permite obtener unas vistas preciosas de las cumbres montañosas de Picos de Europa. A esta altura, también hay una pequeña área recreativa con dos mesas y bancos de madera.

Durante el trayecto, hemos apreciado trabajos de mejora y acondicionamiento de la ruta para que sea más sencillo alcanzar la cumbre del Pico de Ten. Imaginamos que pretenden que la subida sea accesible para un mayor número de visitantes. Pero de momento, no es así.

Pero, eso no implica que no podemos disfrutar del entorno. Llegar hasta estos bancos, lo puede hacer cualquier persona que tenga una condición física aceptable. De hecho, finalizar la excursión en este punto, no es una mala idea, sobre todo, si se va con niños pequeños. El tramo del bosque es precioso y llegar hasta este collado, ya merece la pena.

El espectacular Mirador de La Pica Ten (alt: 1.219 m)

Es a partir del área recreativa cuando la excursión se torna más dura y en la que hay que superar tramos de terreno irregular con algún paso aéreo. Para evitar accidentes y hacer más sencillo el recorrido se han instalado cadenas que ayudan en este cometido.

El punto más elevado del mirador, lo tenemos a la altura de una impresionante cruz formada por dos vías de tren. Desde aquí y desde la plataforma, las vistas son impresionantes. El paisaje abarca una panorámica de 360 grados, en el que podemos apreciar el valle salpicado de pequeños pueblos de montaña, al amparo de la cadena montañosa que los rodea.

Una vez disfrutado del espectáculo, toca regresar con cuidado por el mismo camino.

Dónde alojarse en el Valle de Sajambre

Para hacer esta ruta lo mejor es alojarse en Oseja de Sajambre, o si os gustan los pueblos de montaña con encanto, en Soto de Sajambre. En ambos, encontraréis alojamientos rurales agradables y con una estupenda relación calidad-precio.

Recordad contratar un seguro de viajes para que vuestra escapa sea perfecta. Con IATI Escapadas, sólo tendréis que pensar en vuestras vacaciones.

Reservando tu hotel o casa rural aquí, nos ayudas a mantener el blog. Recuerda que esto no modifica el precio final del alojamiento. ¡Gracias!

Qué ver cerca del Mirador de Pica Ten

Galería de fotos

Vídeo