La Senda de la Mitología leonesa de la localidad de Carande recorre los bosques mixtos cantábricos de la montaña de Riaño, dando a conocer los seres más relevantes de la mitología de la zona como el cuélebre, la vieja del monte, la mora o el trasgu.
La mitología leonesa, al igual que ocurre en otras partes del territorio español, es amplia y variada. En pleno corazón del Parque Regional Montaña de Riaño y Mampodre, más concretamente en Carande, tenemos la Senda de la Mitología leonesa. Un recorrido familiar que nos ayuda a comprender este legado de cuentos, leyendas y personajes mitológicos que tanto llaman la atención a los niños, y también a los mayores.
¿Planificando una escapada?
En nuestra guía de senderismo “Excursiones con niños por Castilla y León”, encontrarás 40 rutas por enclaves sorprendentes.
Cómo llegar a la Senda de la Mitología leonesa
La Senda de la Mitología leonesa se ubica en Carande. Un pequeño pueblo perteneciente al municipio de Riaño.
Tan solo 6 km por la N-621, en dirección a Cistierna, separan Riaño de Carande. Una vez en esta localidad hay que estacionar a la entrada del pueblo en un aparcamiento habilitado para tal fin, el lado de un área recreativa con mesas.
Itinerario de la Senda de la Mitología leonesa de Carande SL LE-7
Inicio de ruta en Carande
Una vez estacionado el vehículo, encaminamos nuestros pasos hacia el pueblo. En la primera bifurcación de calles que nos encontramos, proseguimos por el ramal de la izquierda para dirigirnos hasta la Fuente, donde hay un cartel informativo de la ruta que vamos a realizar.
A partir de aquí, la ruta no tiene pérdida, ni presenta un gran desnivel, ya que transcurre por un camino amplio que supera el paraje de La Carrizosa, dejando las aguas embalsadas del río Yuso y Esla, a la izquierda.
Subida hacia la Collada de la Carrizosa
Cuando las panorámicas del embalse y del pueblo de Riaño se tornan más amplias, la ruta abandona la pista principal para desviarse por la derecha.
Siguiendo el sendero señalizado, ascendemos hacia la collada de la Carrizosa. Superaremos una amplia pradería surcada por un par de arroyos que no presentan ninguna dificultad, salvo en épocas de abundantes lluvias. En este caso, habrá que buscar el mejor paso para evitar mojarse los pies.
Justo a la entrada de una arbolada de avellanos, que es la antesala de un espeso bosque mixto cantábrico de robles, hayas y serbales, encontramos a la Vieja del Monte (Vieya’l Monte). Este primer ser mitológico representa a la madre naturaleza. Es una anciana entrañable, que tiene como compañero a un lobo, y amasa alimentos para los niños del pueblo.
Con las viandas de la Vieja del Monte y un desnivel desfavorable, pero suave, superaremos un regato, para alcanzar al Trasgu. Un pequeño duende con forma humana que entra en las casas y si está de buen humor, ayuda a recoger el hogar, y si no, lo revuelve todo y lo cambia de sitio.
A pesar de que es algo travieso, es un ser difícil de ver, tanto en los parajes leoneses, como en los caminos encantados asturianos, donde también abundan estos seres mitológicos camuflados con vestimentas de musgo.
Ascenso a la Collada de Riosol
En constante ascenso por un precioso y frondoso hayedo, que nos conduce hacia la Collada de Riosol, saldrá a nuestro paso la Güeste de Ánimas. Una fila de personajes varados en un eterno purgatorio y vestidos con viejos ropajes que salen en las noches de luna llena, sobre todo el Día de Todos los Santos, a recorrer los senderos que unen las ermitas y los cementerios de la montaña leonesa para redimir a los simples mortales de sus pecados.
Con estos tenebrosos personajes alcanzaremos el collado de Riasol, donde giraremos a la derecha para continuar por un camino forestal amplio y bien trazado.
Mirador del Reñuberu
Aunque la pista nos lleva hacia el Mirador del Reñuberu, antes podremos ver otros dos seres mitológicos: La Mora y el Diañe.
Para apreciar La Mora, hay que desviarse de forma opcional, unos 100 m por un sendero que parte por la derecha del camino hacia una charca. En esta laguna encontramos a La Mora, que en otras zonas se la conoce como Moura o Xana. Un ser de gran belleza, que vive junto al agua y que en las noches de San Juan se hace visible y capilla sus cabellos con un peine de oro. De esta forma, engatusa a jóvenes incautos para que devanen sus madejas de hilos de oro. Si lo consiguen se quedan con los tesoros que cobija La Mora y si no, vivirán eternamente junto a ella en el fondo de las aguas.
Mientras que, el Diañe, es un diablo travieso con aspecto humano, pero con cuernos, pezuñas y cola de carnero que suele gastar bromas a los caminantes, aunque en realidad solo quiere compañía para sus juegos.
Tras el Diañe, tan solo quedan unos metros de subida y alcanzaremos el mirador de Reñuberu. Una atalaya preciosa con vistas a Riaño y los picos leoneses que rodean al pueblo y su embalse, como Peña Las Pintas (1.985 m), Gilbo (1.679 m), Yordas o Burín (1.964 m), Torre Santa (2.596 m) o Pico Redondo (2.009 m).
Descenso al pueblo de Carande
Aunque el Reñuberu es un ser que provoca tormentas con granizo y fuertes lluvias, la verdad es que, desde este punto la excursión comienza a ser más placentera, ya que solo hay que dejarse llevar hasta el pueblo de Carande.
El camino ahora es cómodo y agradable y deja unas panorámicas preciosas que podemos parar a contemplar desde un banco que encontraremos en la bajada y que anuncia el preludio del final de esta preciosa ruta. Pero antes, cuidado con el Cuélebre que se nos aparecerá cuando menos lo esperemos.
Este ser mitad culebra, mitad dragón es uno de los seres mitológicos de la cultura leonesa más temido y el último que veremos antes de llegar al pueblo de Carande, donde finaliza este recorrido por la cultura y la tradición de la montaña de Riaño y que es patrimonio intangible de la provincia de León.
Track en Wikiloc de la Senda de la Mitología leonesa
Dónde alojarse en Riaño – Planifica tu viaje
Son varios los emplazamientos que podéis elegir para hacer la ruta de la Senda de la Mitología leonesa, Riaño, Argovejo o Verdiago, son algunas de las mejores opciones.
En Riaño una opción práctica y cómoda es alojarse en el hotel Presa. Pero si preferís un entorno más rural y tranquilo, podéis decantaros por la Casa Rural el hayedo de Argovejo, en el precioso pueblo de montaña de Argovejo, o por la Casa Rural Verdiago Vive, en la localidad de Verdiago.
Aunque, las opciones son múltiples y para todos los gustos y bolsillos. En los siguientes enlaces encontraréis todo lo necesario para planificar vuestra escapada familiar.
- Busca los mejores alojamientos para tu escapada.
- Contrata un seguro de viaje con un descuento del 5% para que nada te impida disfrutar de las vacaciones.
- Contrata los mejores tours y excursiones.
- No olvides adquirir alguna guía de viajes, siempre son útiles.
- Alquila un coche para tus vacaciones.
- Busca un vuelo económico para tus escapadas.
- Compra aquí todo lo que necesites.
Qué más ver en León
- Laguna Grande de Babia
- Sendero de Las Tres Marías y Ruta con raquetas en Gistredo, en el Valle de Arbás
- Ruta al Lago Truchillas y al Monumento Natural del Lago de la Baña, en la Sierra de Cabrera.
- Hayedo de la Boyariza, en Geras de Gordón y el Hayedo de Ciñera, en Ciñera de Gordón.
- Las minas de oro de Las Médulas y el mirador de Orellán.
- Valle de Laciana
- Ruta de las Fuentes Medicinales, en Noceda del Bierzo.