La Garganta del Oso es una ruta asequible para toda la familia y que muestra su mejor cara los días de abundantes lluvias y tras el deshielo en las cumbres de la Sierra de Candelario.
Al sureste de la Sierra de Béjar, se encuentra la Sierra de Candelario. Un espacio protegido que esconde auténticos tesoros naturales. Algunos sólo se muestran en periodos puntuales, como ocurre con las cascadas o saltos de agua, pero cuando hacen apto de presencia son un auténtico espectáculo de la naturaleza.
Hoy vamos a realizar la Ruta de la Garganta del Oso. Una excursión sencilla, pero muy bonita, ideal para realizar en familia, incluso con niños de corta edad, tras días con abundantes lluvias.
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Dónde comenzar la ruta
La ruta que os proponemos hoy se puede hacer lineal, de ida y vuelta, comenzando en Candelario o en Navacarros. —En este último caso, la mitad de la ruta discurre por la carretera—. Incluso se puede hacer un recorrido circular que se inicia y finaliza en Candelario, pero nosotros vamos a realizar el trayecto más corto y sencillo.
Para ello nos dirigimos a Candelario o a Navacarros (Salamanca), es indiferente, y nos desplazamos hasta la carretera DSA-181 que une ambas localidades. Independientemente de que nos desplacemos desde Candelario o desde Navacarros, hay que recorrer unos 3 km, hasta llegar a una pista forestal que sale por la izquierda si venimos de Navacarros y por la derecha si venimos de Candelario. Podemos estacionar a la entrada de este camino o si no hay sitio, subir unos metros más, y aparcar un poco más arriba.
Itinerario de la Ruta de la Garganta del Oso
El sendero está señalizado con unas balizas con cuadros de color verde oscuro y es sencillo seguir el trazado.
Esta excursión familiar comienza ascendiendo por el camino forestal que es amplio y cómodo, aunque con un desnivel desfavorable suave hasta alcanzar un bosque de coníferas. La ventaja de ganar altura es que las vistas son más amplias, así, podremos disfrutar de unas panorámicas envidiables del pueblo de Candelario y de toda la Sierra. Además, si las cumbres están nevadas la estampa es aún más bella, si cabe.
Una vez superada la pendiente, alcanzaremos un puente sobre el Arroyo del Barquillo. En este punto tenemos que ir atentos, porque en la primera curva que gira pronunciadamente a la derecha, tenemos que desviarnos por un sendero estrecho que sale a la izquierda. La bifurcación está señalizada, pero si vamos entretenidos podemos saltárnosla.
Este es el inicio de la garganta. Ahora vamos a ir paralelos al cauce del río por un bosque de pinos silvestres. Sólo se recorren unos 100 m de valle y no tiene una gran angostura, pero es muy bonito.
A la altura de la señalización FR (Fin de Recorrido) hay un pequeño salto de agua, donde todo el mundo se para a hacer unas fotos.
Es posible subir un poco más por la garganta, pero el terreno es abrupto y escarpado, y no está exento de una caída accidental. Por tanto, con niños pequeños, personas con movilidad reducida o que no estén acostumbradas a caminar por terreno de montaña, es mejor que den por finalizada aquí la excursión.
Ahora sólo queda desandar el camino y disfrutar del entorno de la Sierra, visitando Candelario o la Covatilla, entre otras opciones.
Dónde alojarse en Candelario
Candelario tiene la distinción de ser Uno de los Pueblos más Bonitos de España, por tanto, creemos que pernoctar en esta preciosa villa merece la pena. Encontraréis una amplia oferta de alojamientos rurales con mucho encanto como la Posada de Turismo Rural Artesa o la Posada de Candelario, ambas con desayuno incluido.
Aquí podéis ver todo los alojamientos que hay disponibles en Candelario.
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