La Sierra de Béjar cuenta con numerosos senderos, uno de ellos es la ascensión al Cancho de la Muela. Una ruta sencilla que permite, una vez alcanzada la cumbre, obtener unas panorámicas espléndidas del páramo extremeño y de la Sierra de Candelario.
El Cancho de la Muela es una de las cumbres más conocidas de la sierra de Béjar. Un pináculo rocoso y amplio con unas vistas excelsas sobre la sierra de Candelario y el valle extremeño de la Garganta, que bien merecen el esfuerzo de la subida. Es un mirador compartido entre las comunidades de Extremadura y Castilla y León, ya que la cima se ubica en la frontera entre Salamanca y Cáceres. De hecho, la elevación final del Cancho de la Muela está en tierras extremeñas.
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Dónde comenzar la ruta
La ascensión al Cancho de la Muela se puede acometer desde varios puntos. Nosotros comenzamos en La Dehesa de Candelario (Salamanca), pero hay una ruta más sencilla que parte desde la presa de Navamuño.
A continuación, vamos a detallar el itinerario de ambas recorridos.
Es el recorrido más sencillo, ya que discurre en todo momento por una pista forestal que llega hasta el Cancho de la Muela.
Para realizar esta ruta, tenemos que desplazarnos en coche hasta La Dehesa de Candelario y atravesar el puente de piedra sobre el río Cuerpo de Hombre. Continuamos por la carretera CC 16.3 que se dirige hacia la localidad cacereña de La Garganta. Iremos dejando la represa a nuestra derecha y cuando la carretera llanea, veremos que hay una pequeña pradera junto al manantial de Fuensanta o Fuente Santa, donde podemos aparcar el coche.
Desde el caño de agua parte una pista forestal con desnivel suave, pero ascendente, que discurre en todo momento por un bosque de pinos. El camino es sombrío y agradable, ideal para los días calurosos de verano.
Al final del pinar, alcanzamos un collado desde el que tenemos unas vistas espléndidas del Circo Glaciar de Hoya Moros, de los Dos Hermanitos y de la Sierra de Candelario. En este punto debemos desviarnos a la derecha para ascender al Cancho de la Muela. Hay que acometer la subida circunvalando el bloque granítico por la izquierda. La ascensión a la cumbre merece la pena y es sencilla, incluso con niños, si se realiza con cuidado.
Una vez disfrutado de las panorámicas hay que regresar sobre nuestros pasos.
Ruta al Cancho de la Muela desde la Dehesa de Candelario
En este caso, la excursión requiere más esfuerzo físico, pero tiene más alicientes para los niños y, por tanto, es más entretenida.
Aparcamos a la entrada de la Dehesa y nos internamos en el paraje natural a pie. Ascendemos por la pista forestal, alternando prados y robles, hasta alcanzar una cancela metálica. Tenemos que abrirla y cerrarla a nuestro paso para poder continuar por una pista amplia que se desvía a la derecha. El camino es agradable por un frondoso robledal, en el que también se alternas pinos y algún que otro castaño. Pasaremos junto a un abrevadero para el ganado. A partir de este punto, tenemos que ir atentos porque en una curva cerrada abandonaremos el camino agrícola para adentrarnos en un sendero por la derecha. Hay algunas marcas blanca y amarillas, pero no se ven con claridad.
Enseguida cruzaremos el arroyo de Peñas Gordas. El caudal del riachuelo depende mucho de la época del año. Si coincide con el deshielo, es probable que os mojéis los pies. Continuamos por una senda estrecha, pero bien trazada hasta alcanzar unos prados de montaña. Hay que superar la pradería siguiendo los hitos de piedra, hasta alcanzar el prado de Peñas Gordas. Se identifica que estamos en este lugar porque hay un gran bolo granítico, coronado por un hito.
En este punto se bifurcan las sendas que van hacia Hoya Moros y el Cancho de la Muela. De frente iremos hacia el circo glaciar, mientras que si giramos ligeramente hacia la derecha nos dirigimos al Cancho. Por tanto, tomamos dirección oeste por el robledal y nos aproximamos al caudal de río Cuerpo de Hombre. Cruzaremos por una pasarela de madera que no se encuentra en muy buen estado, pero que cumple su función.
Continuamos por la falda de la morrena por una senda pedregosa, pero que no tiene ninguna dificultad. Tendremos que sortear una verja de hierro, situada junto a unas grandes piedras graníticas, antes de salir a la amplia pradera de Bocín de Navamuño. En estos pastos suele haber ganado y en época de lluvias, pequeños meandros de riachuelos se abren paso por el valle, con lo cual es una zona que la mayor parte del año está verde, pero también anegada de agua.
Cruzamos el prado en dirección noroeste. Si nos fijamos bien hay unas marcas blancas y amarillas, y unos hitos, que marcan el comienzo de un sendero que asciende entre piornos y escobas hasta la loma de la montaña.
Tras superar una nueva cancela metálica, salimos a una pista forestal que se bifurca en varios caminos. El ramal que sale de frente es el que nos lleva a la Presa de Navamuño. Este camino es el que vamos a coger para regresar. Es el mismo que traeríamos si hubiéramos hecho la ruta partiendo de Fuente Santa. Pero antes vamos a ascender al Cancho de la Muela. Por tanto, giramos a la izquierda y nos dirigimos hacia unos grandes bolos de piedra.
La subida como ya hemos indicado se realizar bordeando la formación granítica por la izquierda, en el sentido de las agujas del reloj. Hay algunos hitos de piedra que marcan el recorrido. Coronar la cumbre es sencillo, no presenta grandes dificultades, de manera que, toda persona con unas condiciones físicas aceptables puede asomarse al mirador. Las vistas desde el Cancho de la Muela son impresionantes. Se observa el gran páramo extremeño de Hervás, La Garganta, Granadilla, los embalses de Baños y, Gabriel y Galán. Así como, la Sierra de Candelario, de Béjar, y a lo lejos, la Sierra de Francia.
Tras dedicar unos minutos a disfrutar del paisaje, iniciamos el regreso. Tenemos que desandar el camino hasta la pista forestal que desciende hacia el embalse de Navamuño. La bajada no tiene pérdida, debido a que no hay desvíos ni bifurcaciones. Sólo se puede atajar un tramo, si se desea, por un corta fuegos señalizado con grandes hitos.
A la altura de Fuensanta, giramos a la derecha para ir por la carretera asfaltada hasta el aparcamiento de La Dehesa donde tenemos el coche.
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Dónde alojarse en Candelario
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Buenas noches, soy Conchi de “Valdeonissimo TAXI” en Posada de Valdeón. Me encanta vuestra página y me es muy útil para desplazarme “a tiro hecho” durante mis vacaciones de invierno. Mis hijos ya son mayores pero cuando podemos vernos siempre salimos a la montaña y, dado que yo paso mucho tiempo en el taxi en temporada, para empezar a hacer piernas siempre elegimos rutas poco exigentes para luego ir aumentando el nivel de dificultad. Es la página perfecta para mi. Muchas gracias.
Hola Conchi, muchas gracias por tu comentario, nos alegramos de que te sea de utilidad nuestro blog. Un saludo