El pueblo fronterizo de Sobradillo está situado en el corazón de Los Arribes. Tiene un gran legado cultural y natural. La observación de aves sobrevolando impresionantes paisajes y su patrimonio monumental de ermitas y fortificaciones, lo convierten en un espacio privilegiado.
Aprovechando que durante el fin de semana las temperaturas han sido más benignas nos hemos desplazado hasta el Parque Natural de Arribes del Duero.Después de tanto frío ya nos apetecía dar un paseo relajado con los niños al calor de los rayos solares. Para ello, nos hemos desplazado al noroeste de la provincia de Salamanca. Hemos ido a Sobradillo, un pueblo fronterizo con Portugal para asomarnos a dos atalayas: el mirador del Molinillo y el mirador del Soto.
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Casa del Parque de Sobradillo
En Sobradillo se ubica una de las Casas del Parque de Arribes del Duero. En sus instalaciones podemos recibir información pormenorizada sobre la flora, la fauna, costumbres, rutas… de la zona y el entorno que nos rodea.
Además, se puede visitar El Torreón de Sobradillo, un espacio didáctico que os animamos a conocer, sobre todo si vais con niños.
El Torreón como su nombre indica es la torre de homenaje de un antiguo castillo que ha sido restaurada. Cuenta con cuatro plantas, el mirador de las almenas y el aljibe.
Según se va ascendiendo por las distintas plantas del Torreón, se va realizando paralelamente, un recorrido simulado que parte del fondo del cañón del Espacio Natural de Arribes y va ascendiendo por desfiladeros y cascadas hasta finalizar en dehesas y campos de cultivo.
Por tanto, este recorrido didáctico y muy entretenido comienza en la planta baja con los ríos más importantes que atraviesan Arribes del Duero.
Al ascender a la primera planta, veremos una escenificación de las cascadas del Parque y los animales que lo habitan. Podremos observar cigüeñas negras, buitres leonados, búhos, nutrias, águilas… y una ambientación de los murciélagos que pernoctan en los cuevas y grutas de Arribes.
En los siguientes niveles unos carteles informativos nos indican la importancia de las fortificaciones, castros y ermitas que se alzan al borde de los ríos. Así como, de otros restos de valor arqueológicos y etnológicos que se pueden ver en la comarca de Vitigudino.
Según vamos ganando altura en el Torreón, también lo hacemos en las escarpadas paredes verticales de los cañones de Arribes. Llegando a laderas soleadas de encinas, robres, enebros, albaricoques y olivares.
En el exterior del Torreón tenemos el mirador de las almenaras. Una preciosa atalaya desde donde vemos la iglesia de Santiago Apóstol, el pueblo y los campos de cultivo.
El precio de la entrada general es 1€. Familias numerosas, niños a partir de 7 años y jubilados el coste es 0.50€. Mientras que para los menores de 7 años y discapacitados la entrada es gratuita. (datos año 2024).
En la Casa del Parque nos informaran de cuatro posibles rutas de senderismo que podíamos hacer partiendo desde Sobradillo:
- Mirador del Molinillo (ida/vuelta).
- Mirador de El Soto. Ampliable al mirador de El Buraco (ida/vuelta).
- Ruta circular: Sobradillo – Mirador del Molinillo – Mirador del Soto – Mirador el Buraco – Sobradillo (distancia: 15 km, dificultad: media).
- Ruta Cachón de la Diabla y del Berrido.
En esta entrada nos vamos a centrar en las rutas hasta el mirador del Molinillo y el Soto.
Ruta Mirador del Molinillo
De las cuatro rutas posibles, nosotros nos decantamos primero, por realizar el sendero de ida y vuelta hasta el Mirador del Molinillo.
Comenzamos la ruta en la Casa del Parque. Para ello, seguimos las señales rojas y blancas y nos dirigimos por la parte posterior de la Iglesia hacia las afueras del pueblo.
Cuando llevamos recorridos solo unos metros, vemos una fuente romana y un crucero. Aquí el camino se bifurca. Debemos tomar el ramal de la derecha, porque si cogemos el camino de la izquierda iremos por el GR 14.1 “Senda del Águeda”.
Sabremos que vamos en la dirección correcta porque enseguida veremos la Ermita del Cristo de la Cuesta. A partir de este momento, debemos seguir las señales blancas y amarillas y los letreros del Mirador del Molinillo.
Nos adentraremos en fincas y dehesas delimitadas por paredes de piedra. Nos daremos cuenta de que el trabajo de la tierra es duro y laborioso, pero que las gentes de los Arribes han sabido utilizar los recursos naturales sin agotarlos.
Un ejemplo de ello, son estas paredes de cantos y piedras que han sido extraídas de la tierra porque molestaban para el cultivo y se les ha dado un segundo uso para formar hileras de paredes que separan las propiedades.
Por el camino veremos los restos del Convento de Santa Marina la Seca. No nos podemos acercar porque se encuentran en una propiedad privada. Una pena, la verdad 😊.
Cuando llevamos recorridos unos 2.5 km desde el inicio de la ruta, observaremos que recientemente se ha construido un aparcamiento. Esto permite estacionar el coche y hacer solo la parte final del sendero a pie.
Nosotros nos decantamos por la segunda opción. De forma, que realizamos caminando, solo los dos últimos kilómetros de la ruta.
El sendero, en este punto, tiene un desnivel descendiente y se estrecha un poco con respecto al camino vecinal del primer tramo del recorrido. Pero está correctamente señalizado hasta alcanzar unos corrales o chiviteros que hay previos al mirador.
Las cabras han sido los animales domésticos más comunes de esta zona de Arribes. Motivo por el cual, encontramos chiviteros y corrales en los aledaños de los caminos.
El mirador sobre el río Águeda son unos bloques de enormes rocas, se trata de una atalaya natural. Por tanto, hay que tener precaución con los más pequeños, debido a que, no cuenta con ninguna barandilla o barrera.
Desde este paraje, veremos los recodos y meandros creados por el río Águeda al ir erosionando el terreno.
Las paredes de granito que han resistido a la erosión han formado paredes verticales que finalizan en suaves pendientes aptas para el cultivo de olivos, almendros o naranjos.
Este es un buen lugar para hacer un receso. Después, tras disfrutar de las vistas y reponer fuerzas, solo queda desandar el camino.
Descargar track en Wikiloc de la ruta «Mirador del Molinillo» |
Mirador El Soto
Como os hemos indicado anteriormente, desde el Mirador del Molinillo es posible seguir el sendero y alcanzar el Mirador de El Soto para hacer la ruta circular.
Pero nosotros consideramos que un recorrido, de aproximadamente 10 km, era excesivo para nuestros hijos. Sobre todo, por el tipo de terreno entre ambos miradores. Se trata de una senda estrecha, con subidas y bajadas y firme irregular con posibles caídas en algunos puntos. Motivo por el cual, realizados ambas sendas hasta los miradores por separado.
Pero tened en cuenta, que, se puede ampliar aún más la ruta y hacerla con una longitud de unos 15km, ya que, es posible descender desde el mirador del Soto hacia el río, en zig-zag, hasta alcanzar el mirador de El Buraco y luego regresar a Sobradillo. Si vais con niños mayores, este recorrido es una buena opción para disfrutar de los paisajes de Arribes.
Nosotros, estas rutas, las dejamos para otro día… los niños son aún pequeños. Pero no renunciamos a ir hasta el Mirador del Soto. Solo que, lo hacemos no por este sendero circular, sino siguiendo las indicaciones que van directamente desde Sobradillo a los miradores del Soto y el Buraco.
Por tanto, para ir al Mirador el Soto hay que volver hasta las ruinas del Convento de Santa Marina la Seca. A la altura del Convento, debemos desviarnos hacia la derecha. Esta bifurcación está señalizada con marcas blancas y amarilla y letreros verticales.
Al igual que en el caso anterior, se ha acondicionado un aparcamiento para estacional el coche y realizar el último tramo a pie.
Este sendero es más agreste que el anterior, pero igual de interesante.
Para alcanzar las vistas desde el mirador el Soto sobre el río Águeda hay que caminar aproximadamente un 1 km.
Y si os quedan ganas, descender hasta el mirador de El Buraco y luego retornar hasta el aparcamiento.
Ambas rutas os permitirán tener unas hermosas vistas de Arribes con sus características paredes enhiestas, su vegetación y sus aves rapaces surcando el cielo.
Y no podemos despedir esta entrada sin hacer referencia al rico queso de oveja de Sobradillo. En el propio pueblo se encuentra la fábrica de Quesos Abadengo donde podéis comprar y degustar un rico queso curado, semi-curado, añejo o requesón.
Dónde alojarse en Sobradillo – Planifica tu viaje
Sobradillo es uno de los pueblos de Arribes del Duero que ofrece un mayor número de rutas de senderismo, por tanto, alojarse en el pueblo o en los alrededores es lo más recomendable. En los siguientes enlaces encontraréis todo lo necesario para disfrutar de vuestra escapada.
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